miércoles, 20 de abril de 2011

Madrugadas-

Te estoy extrañando de sobremanera en este momento. 
2:54 a.m.

En ocasiones te pienso, en otras te olvido completamente.
Ignoro si me piensas, si me extrañas, si me olvidas, pero es bien sabido que uno no puede vivir a expensas de los sentimientos ajenos porque ni siquiera se puede elegir a expensas de qué se quiere vivir, se vive y ya. 
O sea que te extraño aunque justo ahora, 2:57 a.m., me estés olvidando terriblemente; como para matarme, como para enterrarme en un pozo al que llegaste sin saber cómo y del que te fuiste de la misma manera. Aunque en estos momentos ni siquiera esté muerta para ti porque en realidad viene siendo como si nunca me hubieras conocido; aunque en estos momentos ni me puedas imaginar, es más, ni quieras.
Y aunque quizás en tres horas no existas para mi y tu corazón me rememore vehementemente; tantísimo, como si pudieras tocarme con tus dedos y sentir con perfección enferma el frío de mi piel anhelando tu calor, aunque puedas escuchar mi voz, ver mi sonrisa y sonreír con ella. Aunque quizás en tres horas te duela el pecho porque piensas que no te extraño, y quizás sea cierto porque no lo haré...

Aunque lo que sea; son las 3:02 a.m. y yo te extraño de sobremanera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario