martes, 11 de enero de 2011

Wíniber.

Hablemos seriamente. Empecemos a sincerarnos un poco, si es que la gente sincera es seria o la gente seria es sincera, pareciera que no es así, casi podría asegurarlo, de ahí en fuera ignoro.

Nadie sabe qué le ocurría al joven Wíniber. Joven alegre y un tanto reservado pero nunca demasiado como para llamar a causa de eso atenciones. Si analizamos su situación seriamente, como lo hemos solicitado anteriormente, tenemos que decir que se cree que todo comenzó una mañana de abril, que nadie le había robado aún, porque fue ese día en el que empezó a guardar más silencio del que se suponía como persona reservada. Su abuela lo notó y le dijo "¿y ahora qué te pasa, escuincle?" a lo que Wíniber respondió con un gesto de la más exigente indiferencia.

Las personas poco serias juran por su cruz en dedos que ese día empezó todo. Pero no. Todo comenzó ocho meses antes cuando a Wíniber le brotó una lágrima de su ojo izquierdo sin que él lo pudiera prever. Lágrima fruto de la emoción cursilona provocada por la película romántica que estaba por terminar de ver, no pudo hacer más que extender su brazo derecho y mirar fijamente su dedo índice con el que se deshizo de las lagañas de su ojo derecho. Se fue a la cama sin notar que la lágrima aún colgaba de su barbilla; la diminuta lágrima se hacía cada vez más panzona mientras luchaba por no caer agarrada con fuerza de los bordes de un poro. El joven escuchó un ruido que desvió inmediatamente su mirada enérgicamente en dirección a la cocina, la lágrima salió volando y aterrizó en el suelo, se escuchó el "¡plaf!" y el cielo limpio empezó a llover. 

A su primer hijo le llamó Andrew Solo, al segundo Anakin Yorke, al tercero Bonafont, al cuarto Gateway. Wíniber nunca pudo entender cómo su abuela se atrevía a hacer esa clase de preguntas después de verlo tener 15 hijos después. Se lamentaba de sí mismo y le gritaba al mundo por qué no entendía la amargura que representa estar condenado a felicidad eterna, a una triste felicidad eterna, porque cada lágrima era un hijo, y él ya no los podía mantener.

1 comentario:

  1. Solo?! iraaa [Frases del PPG] Anakin?! Bonafont y aún peoor! Gateway?! Jodeer! gonorrea!! joputas!! Grrgrrgrgr

    DI-FA-MA-CIÓN SEÑORES ESTO ES UNA DIFAMACIÓN.

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